La COVID-19 ha sido decisiva para que entorno a un 59% de las empresas españolas apuesten por trabajar en la nube y destinen un 30% de su presupuesto a la tecnología, bien migrando las aplicaciones ya instaladas a un proveedor nuevo o apostando por aplicaciones diseñadas ya para el sistema cloud, ahorrándose así el proceso anterior.
Las empresas tienen claro que la personalización del sistema es una gran ventaja ya que permite añadir alguna funcionalidad a medida (administrador del sistema de la nube, medidas de seguridad...)y mejorar los resultados. Se prevé que para el 2024 el 90% de las empresas más importantes basarán su éxito en la combinación de tecnología con herramientas multicloud. A la vista está que la herramienta más eficaz para no perder competitividad en un futuro es el uso de varios servidores cloud, una adaptación que está al alcance de todo tipo de empresas dada su escalabilidad y su posibilidad de personalización. El retorno de la inversión no se hace esperar y la adaptación de los profesionales a su manejo se hace realidad tras cursos de formación en las empresas.